Por Jonathan Clark Miguel Martínez
No puede negarse el hecho de que, a sus 89 años de edad, Miguel Martínez es el instrumentista de mayor trascendencia en toda la historia de la música de mariachi. No sólo marcó la pauta para la trompeta sola en el mariachi, sino que también definió y popularizó la modalidad de las dos trompetas dentro de este género musical. Además, es un distinguido y prolífico compositor de canciones populares y piezas instrumentales para mariachi. Pero, como dice el proverbio, «Nadie es profeta en su propia tierra». Hasta hace muy poco, los medios de comunicación mexicanos habían prácticamente ignorado a Martínez, a pesar de numerosos artículos y entrevistas que lo refieren en el extranjero. (Para dar un ejemplo, fue figura principal del reciente documental El Mariachi, por The History Channel.)
El Encuentro Internacional del Mariachi fue creado en 1994 por la Cámara de Comercio de Guadalajara. Hoy en día, es el festival de mariachi más importante del mundo y el que cuenta con la participación del mayor número de grupos de distintos países. En sus inicios, además de presentar mariachis contemporáneos, el festival presentaba grupos de tipo mariachi muy poco vistos —conjuntos rurales al estilo antiguo y hasta de origen indígena— pero la participación de éstos pronto se fue eliminando. En 2002, para dar mayor exposición a esta faceta menos valuada del folclor mexicano, Cornelio García de la Secretaría de Culturas Populares de Jalisco organizó el primer Encuentro de Mariachi Tradicional, donde una de las reglas básicas es que a los grupos participantes no se les permite incluir trompeta. Con el tiempo, el Encuentro Internacional del Mariachi y el Encuentro Nacional del Mariachi Tradicional se programaron consecutivamente en una celebración de dos semanas de música de mariachi y, hoy en día, los dos encuentros se complementan magníficamente entre sí. En términos generales, el primero se dedica al aspecto comercial y el segundo al aspecto cultural de la música de mariachi, aunque existe considerable coincidencia e intercambio entre ambos.
El alcance de esta celebración de dos semanas es demasiado amplio para tratarlo aquí. El Encuentro Tradicional de este año incluyó más de treinta eventos por separado; el Encuentro Internacional, más de cien. Este artículo se centra principalmente en los eventos donde Miguel Martínez tuvo mayor participación.
Aunque no estuvieran dentro de la programación oficial, los fandangos improvisados que se llevaban a cabo cada noche en el vestíbulo del hotel sede, el Aranzazú Eco, fueron algunos de los eventos más inolvidables del décimo Encuentro Nacional de Mariachi Tradicional. Al son de arpa grande, guitarra de golpe y violín, bailaban parejas sobre una tarima de madera traída para la ocasión. Bailarines, cantantes y músicos se alternaron de forma continua, y en ocasiones algún participante percutía sobre la tapa del arpa. El entusiasmo y la asistencia fueron extraordinarios, y la fiesta solía continuar casi hasta la madrugada. Representaba la manifestación de esta música en su forma más original, en un ambiente que rara vez se encuentra en un entorno urbano.
Fandango en el vestíbulo del Hotel Aranzazú
Para muchos citadinos, ésta fue nuestra primera oportunidad de ser testigos y partícipes en un fandango mariachero tradicional. Cada noche don Miguel y su esposa se encontraban disfrutando de esas festividades y también era una nueva experiencia para ellos. «Yo había leído y oído acerca de estos eventos, pero ésta fue la primera vez que tuve la oportunidad de ver uno», dijo. «En todos los años que viajé con el Mariachi Vargas y otros grupos, nunca nos encontramos con un fandango, ni supe cómo era la tarima o cómo bailaban las parejas sobre ella. ¡Qué pies de acero! Tampoco había visto cómo se toca la percusión sobre el arpa», aseveró. «Estoy muy contento de ver que esta tradición tierracalenteña se conserva no tan sólo por la generación de más edad, sino también por la gente joven».
Aunque hubiera sido más lógico que el moderno Encuentro Internacional invitara a Guadalajara a Miguel Martínez, fue Ignacio Bonilla Arroyo, director de Culturas Populares de Jalisco y del Encuentro Tradicional, quien tuvo la visión de invitar al maestro a participar en el coloquio El mariachi, un patrimonio cultural de México, que tuvo lugar el 25 y 26 agosto en El Colegio de Jalisco, en el municipio tapatío de Zapopan.
Coloquio en El Colegio de Jalisco
El viernes, 26 de agosto, a las diez de la mañana, La Mesa II del Coloquio tuvo su apertura con la ponencia «Miguel Martínez: patriarca de la trompeta mariachera». Ahí tuve el honor de presentar al legendario maestro en una especie de entrevista en vivo donde él respondió a preguntas clave que daban pie a que se explayara sobre determinados temas, con el apoyo de imágenes y sonido que incluyeron fotografías históricas y fragmentos de sus muchas grabaciones. De todos los músicos de mariachi que he conocido, Miguel Martínez es quien más amenamente nos narra sus vivencias. Tiende a cautivar a todos los públicos a los que se dirija, y la pequeña audiencia en El Colegio de Jalisco no fue la excepción.
Por la tarde, en el hotel sede, el maestro Martínez impartió otra ponencia para los participantes del Encuentro de Mariachi Tradicional, donde la asistencia fue mayor. A pesar de que ninguno de los grupos participantes utiliza trompeta, los músicos demostraron gran interés en la historia de cómo este instrumento se convirtió en parte del mariachi. Como protagonista principal de dicha evolución, don Miguel habló con autoridad absoluta, y el público le respondió con gran reverencia. Al término de la plática, decenas de músicos tradicionales se le acercaron con preguntas, felicitaciones y peticiones de autógrafos y fotos con él. Un músico de Michoacán le dijo: «Maestro, de donde yo vengo, los conjuntos de arpa no usan trompeta, pero quiero hacerle saber que toda mi vida he admirado su forma de tocar en las grabaciones y que su trompeta sigue dándome mucha alegría». Al final de la presentación, Armando Cervantes Tinoco, director de los talleres de música del Encuentro Internacional del Mariachi, invitó a don Miguel para hablar con sus alumnos al siguiente lunes.
Entrevista para la televisión argentina
El sábado, en San Pedro Tlaquepaque, el Canal 44 de la Universidad de Guadalajara grabó para la serie Se va y se corre lo que probablemente fue la primera entrevista en forma que el maestro haya dado a la televisión mexicana. Más tarde, también concedió una entrevista a la televisión argentina. Después de la videograbación, el equipo invitó a don Miguel, a su esposa y a mí a cenar con ellos en el famoso conjunto de restaurantes el Parián. Los mariachis locales inmediatamente reconocieron al maestro y lo rodeaban de forma continua durante el tiempo que estuvimos ahí.
Guadalupe Vallejo de Martínez, Miguel Martínez e Ignacio Bonilla con el premio Galardón Mariachi
En la Gala de Mariachi Tradicional que se celebró en el Teatro Degollado la noche del domingo 28, el maestro Martínez fue premiado con el Galardón Mariachi, un trofeo y diploma que se otorgan a los guardianes de la tradición mariachera cuyas carreras demuestran méritos indiscutibles y que a la letra decía: “A don Miguel Martínez, por su gran contribución a la preservación de la música tradicional de mariachi.” Fue la primera vez que recibió un premio en Guadalajara. «Me da muchísimo gusto que lo hayan honrado», dijo Rigoberto Alfaro, ex miembro del Mariachi Vargas, quien estuvo presente como juez calificador en el concurso de mariachis tradicionales. «Cualquier homenaje que se le haga a Miguel Martínez le queda chico comparado con lo que el señor merece. En el mariachi, nadie jamás lo ha igualado», concluyó Alfaro.
Con el ex compañero Rigoberto Alfaro
Con este evento de gala se cerró oficialmente el décimo Encuentro de Mariachi Tradicional, pero el fandango en el Hotel Aranzazú continuó casi hasta el amanecer.
Armando Cervantes Tinoco presenta al maestro en la apertura del Encuentro Internacional
Cuando llegamos a la ceremonia de inauguración del decimoctavo Encuentro Internacional del Mariachi, el lunes 29 de agosto, nos quedamos impresionados por el gran número de alumnos presentes en el inmenso salón. Representaban más de 50 conjuntos de mariachi, más de la mitad de los cuales habían llegado desde fuera de México. Don Miguel tenía programado hablar por una hora, y el tiempo pasó volando. Terminando la hora, anuncié que teníamos que continuar la conversación otro día. «¡Nooo!”», exclamó la multitud. «¡Que nos siga platicando!» A don Miguel le concedieron una media hora adicional, lo que le permitió satisfacer a la multitud y llegar a una conclusión aceptable. Una hora después de la charla, todavía había filas de gente esperando para firmar autógrafos y tomar fotos con el maestro. Cuando finalmente logramos regresar al lobby de nuestro hotel, ahí fue rodeado por otra contingente.
Dirigiéndose a los alumnos del XVIII Encuentro Internacional del Mariachi
Por la tarde, viajamos a la laguna de Chapala, a una hora de Guadalajara, donde los hermanos Hernández habían organizado una parrillada en honor a don Miguel. Estuvieron presentes Antonio, Pedro (Pedro Rey), Crescencio y José Hernández —todos consumados trompetistas—, al igual que el renombrado Jesús Rodríguez de Híjar. Fue un apropiado final para una visita triunfal a Jalisco. Al día siguiente, el maestro y su esposa regresaron, cansados pero contentos, a su casa en la capital mexicana.
En Chapala con Pedro (Rey) Hernández, Jesús Rodríguez de Híjar, Jonathan Clark, Crescencio Hernández, Miguel Martínez, José Hernández y Antonio Hernández
Aunque se celebran anualmente un gran número de festivales de mariachi en Norteamérica y otras partes, son pocas las veces que honran a los músicos que forjaron la tradición del mariachi. «El último día, se me acercaron músicos de Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Nicaragua, Honduras, México, Estados Unidos y otros países para decirme que desde hace años me querían conocer, y me preguntaban por qué no había venido antes a este evento», comentó don Miguel. «“Creo que me tenían en el refrigerador”, les dije. “Solo tenían que invitarme”».
Tuvieron que transcurrir más de 70 años de labor artística antes de que el patriarca de la trompeta mariachera fuera reconocido oficialmente en Guadalajara, la tierra del mariachi. Pero, como dice el refrán, «Más vale tarde que nunca».
You have knocked the ball out ofthe park, Jonny. this is truly and amazing blog, website etc… You make me proud for once being a mariachi. I will read this every week and as often as I can.
This is truly the best thing that ever has happen to the history of mariachi!
Dios te Bendiga.
Alfredo A. Tarazón
que Dios lo conserve por muchos años mas.Muchas felicidades Maestro Miguel.
Great blog Jonathan, definitely worth reading and enjoying how they have finally recognized such a brilliant figure in the mariachi genre, Miguel Martinez.
MUY DISTINGUIDO JONHY TE DEJO UN GRAN ABRAZO Y MI RESPETO; TE QUIERO COMENTAR QUE YA TENGO
ALGUNOS AMIGOS DISPUESTOS A SER COMPLICESEN NUESTRO PROYECTO.
AGRADEZCO TU COMENTARIO, DON MIGUEL ES UN SER HUMANO DE PRIMERA Y EL MEJOR MUSICO DE TROMPETA QUE CONOZCO… QUERIDO AMIGO, FELICIDADES..